El personal es tan amable que te hacen vivir en un cuento de hadas, gracias a Ana M. Y Ana G. de Travel Smart Club Por sus distinciones y por ese detalle que me pusieron en la habitación de mi cumpleaños. Merece volver un montón de veces porque cada vez que vas te hacen sentir como si llegaras a la casa de un familiar que sabe todo los gustos y necesidades tuyas antes de que puedas expresarlas.